Puede que no sea tu casa para siempre, pero eso no significa que no pueda reflejar tu estilo y personalidad.
Si nunca has pegado un cartel de "VENDIDO" en una inmobiliaria, probablemente ya sepas que el alquiler puede hacer que el estilo y la decoración de tu casa sean un poco menos flexibles de lo que te gustaría. En algunos países, como Australia, tampoco se pueden pintar las paredes ni hacer cambios permanentes, ni siquiera clavar un cuadro. Entonces, ¿cómo hacer que tu casa se sienta como tú?
La buena noticia es que hay un montón de soluciones para inquilinos con un gran impacto. Si te gustan los colores y eres inquilino, o si simplemente no te atreves a hacer cambios permanentes en tus interiores, aquí tienes por dónde empezar.
@our.home.le.fleur ha utilizado sus propias calcomanías para dar color y personalidad a los espacios de sus hijos.
calcomanías + papel pintado
Si te mueres de ganas de dar color a tus paredes pero tu piso es una oda al minimalismo en blanco sobre blanco, ¡esto es para ti! No necesitas pintar para añadir color, las calcomanías removibles son un arreglo fácil para las paredes desnudas y dejarán tu pintura libre de daños. Y lo mejor de todo es que son reutilizables, así que incluso puedes trasladarlas a tu próxima casa cuando te vayas. Los divertidos motivos de las pegatinas alegran las habitaciones infantiles, mientras que los papeles pintados despegables pueden añadir un estampado retro o su tono favorito a un salón, cuarto de baño o dormitorio.
Crédito de la imagen: @our.home.le.fleur
Combina colores y estampados para crear tu propio oasis en el dormitorio, como @turmerichouse (izquierda) y @sophie_elinor (derecha).
ropa de cama + textiles
Si lo que no te gusta es tu dormitorio, nuestro consejo es sencillo: ¡cambia las sábanas! Dado que la cama es el punto central de la mayoría de los dormitorios, un cambio de sábanas puede transformar por completo el aspecto y la sensación de tu espacio. Nos encantan los juegos de sábanas desparejados pero complementarios, con estampados que combinen en una familia de colores similar y un toque de color y textura gracias a detalles de acabado como mantas y cojines. Antes de que te des cuenta, estarás listo para irte a dormir.
Agrupa las obras de arte como este lila de @theposterclub o elige marcos atrevidos como los de @turmerichouse.
impresiones artísticas
Añadir arte a las paredes es una de las formas más sencillas de aportar color y personalidad. Las láminas son una forma asequible de hacer que tu casa refleje tu estilo y tus intereses. Puedes crear una pared de galería juntando una colección de tus obras favoritas, o elegir una pieza destacada para que ocupe el primer lugar. Puntos extra por pintar los marcos para añadir un toque extra de color. ¿No puedes clavar nada en la pared? Las láminas quedan preciosas encima de un armario (pista, pista...) Y, por supuesto, puedes llevártelas cuando te mudes: al fin y al cabo, en casa es donde está el arte.
Puede que las paredes sean blancas, pero los muebles pueden aportar un toque de color. Imágenes de @miiostoreau (izquierda) y @annieeveringham (derecha)
muebles de diseño
Hemos dejado lo mejor para el final. Aunque tengas las paredes en blanco y el suelo liso, puedes llenar tu casa de estilo con muebles coloridos y llamativos. Los armarios son imprescindibles para los inquilinos: son una alternativa perfecta a los armarios empotrados, así que si tienes poco espacio de almacenamiento (el eterno dilema de los inquilinos), ¡un armario te lo soluciona! También son una forma estupenda de añadir un toque de color a tu espacio. Mezcla y combina tus combinaciones de colores para expresar tu personalidad, o elige tu color favorito para un momento de atrevimiento. Como los armarios son tan versátiles, siempre encontrarás un nuevo uso para ellos. Utiliza uno como armario ropero o para la ropa blanca, y en tu próxima casa sirve también como despensa, almacén de artículos de limpieza o armario para manualidades. Las opciones son realmente infinitas.
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