Vale, no somos precisamente profesionales (al fin y al cabo, era nuestra primera feria), pero hemos aprendido algunas cosas de Life Instyle:
1. Ser humano. (¡Lo más importante!)
No puedes evitarlo, tú eres humano, no trates de ocultarlo. A veces mezclamos las palabras, olvidamos cosas, se nos caen las tarjetas de visita al suelo. No pasa nada. ¿Sabes qué es lo mejor? La persona con la que hablas también es humana.
2. Prepárate.
Piensa en las preguntas que podrían hacerte y prepara un banco de memoria con las respuestas, practica y familiarízate con ellas. Mejor aún: ofrezca una solución antes de que le hagan la pregunta. Sabíamos que una pregunta que nos harían sería "¿dónde las usarán los clientes?", así que diseñamos las taquillas para explicarlo, adelantándonos a la pregunta.
3. Conoce tus números.
Durante los cuatro días aprendimos que lo que realmente interesaba a los compradores era el precio al por mayor. El primer día dejábamos esta parte para el final de nuestra charla, pero al cuarto día solía venir justo después del "hola". No tengas miedo de hablar de dinero.
4. Tu postura importa...
Cuando estás rodeado de stands bonitos y bien hechos, no quieres destacar por razones equivocadas. Intentamos que nuestro espacio llamara la atención, fuera accesible y representara la esencia de la marca. Elegimos colores llamativos y en bloque y dejamos mucho espacio libre en el suelo para que la gente entrara.
5. Pero no lo es todo.
Es importante recordar que lo que vendemos es nuestro producto, no lo que lo hace atractivo. No tiene por qué costar una fortuna y, aunque perdamos mucho sueño pensando en cómo comercializar nuestros productos, es sólo una parte del rompecabezas más grande. Tu marca hablará a través de cada punto de contacto, intenta tener en cuenta lo que experimenta el comprador y haz que cada elemento refleje la imagen que quieres transmitir.
6. Piensa en ello.
Aprendimos que a veces no pasa nada por decir "lo pensaremos y ya os contaremos". Puede ser un poco desalentador tener que responder a preguntas sobre la marcha, así que en lugar de comprometernos a dar una respuesta en ese mismo momento, fuimos sinceros y dijimos que necesitábamos hablarlo y que se lo haríamos saber. (Otro ejemplo de "ser humano").
7. Haz amigos.
Con tus vecinos de stand, con los organizadores, con los limpiadores, con los minoristas, con cualquier persona que pase por allí. Sí, el objetivo del juego es vender, pero nunca se sabe qué se puede necesitar ni con quién se está hablando. Sé amable, siempre.
8. Ponte cómodo.
Vale, las dos llevamos tacones algunos días, ¡pero muy cómodos! La clave es ser uno mismo y reflejar la marca al mismo tiempo. Ponte algo con lo que te sientas bien. Para mí es un mono, ¡porque me siento capaz de hacer cualquier cosa con un body! (¡excepto ir al baño!)
9. 9. Seguimiento.
La verdad es que, una vez terminado el espectáculo, empieza realmente el trabajo. No ha habido descanso. Los minoristas están ocupados y tienen una pila de pedidos que atender, asegúrese de que saben que usted sigue ahí y comuníquese con ellos. Este es realmente el momento en el que la inversión merece la pena.
10. Haz vida social.
No es sano, pero estábamos pegados al móvil. No paraban de aparecer likes, comentarios y fotos, y era una sensación fantástica. Instagram es una forma estupenda de aparecer en el radar de la gente y crear una conexión. El hashtag del evento funcionó muy bien. Úsalo.
La verdad es que nos equivocamos en algunas cosas. En general, conseguimos lo que esperábamos y mucho más. Nos fuimos a casa sintiéndonos orgullosos y agotados, pero sobre todo entusiasmados por lo que está por venir.
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
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